La guía definita para mejorar tu expresividad corporal en comunicación.
La comunicación requiere de una preparación a 360º en varios aspectos físicos, vocales y emocionales. En este artículo veremos qué tipo de preparación física puede ayudar a cualquier persona a ser un comunicador top.
Para entender la importancia del cuerpo dentro del proceso comunicativo, tenemos que entender que cada una de sus partes expresa algo aunque nosotros no queramos; este proceso es inevitable ya que hemos nacido para relacionarnos y que solo dejamos de comunicar cuando nos morimos.
Controlar cada elemento expresivo nos da la ventaja de controlar exactamente todo lo que estamos diciendo y a la vez decidir las reacciones del destinatario del mensaje (comprar un producto, volver a llamarnos, confiar en nosotros, etc.).
El entrenamiento físico de un comunicador incluye el desarrollo de todos sus elementos expresivos.
Cada parte de nuestro cuerpo se tiene que desarrollar bajo distintos aspectos: coordinación, movilidad, flexibilidad, expresión, calidad del movimiento y disociación. Controlar cada uno de estas partes en cada elemento expresivo nos convierte en dueños de nuestra comunicación.
pautas de desarrollo
Después de haber leído este artículo sabrás exactamente cómo entrenar tu cuerpo y sacarle el máximo partido a nivel comunicativo. Aquí encontrarás todos los aspectos y ejercicios básicos para comenzar, pero el verdadero resultado lo notarás si te lo tomas en serio y practicas a diario. Cualquier deportista entrena todos los días aunque domine su deporte; lo que le mueve a hacerlo es potenciar sus capacidades y alcanzar grandes metas con el tiempo. En comunicación pasa exactamente lo mismo.
1. Movilidad corporal: Aprende a controlar cada parte de tu cuerpo.
2. Flexibilidad corporal: Un cuerpo más flexible es un cuerpo más expresivo.
3. Disociación corporal: Domina tu cuerpo para que no sea él que te domine a ti.
4. Calidades de movimiento: Usa matices en tu expresividad según la situación.
5. Emotividad corporal: Aplica emociones a cada gesto y conviértelo en acción.
1. Movilidad corporal: aprende a controlar cada parte de tu cuerpo.
Como he mencionado más arriba, nuestro cuerpo está dividido en distintos elementos expresivos que se encargan de transmitir a las personas que nos rodean diferentes mensajes.
Aprender a dominar cada elemento expresivo nos convierte en dueños de lo que comunicamos.
EJERCICIO 1: Pon música con un ritmo lento y empieza a buscar distintas formas de moverte con cada elemento expresivo. Muy importante centrarse solo en uno en concreto y practicar distintas maneras de moverse para chequear su movilidad y el control que tienes sobre él.
2. Flexibilidad corporal: un cuerpo más flexible es un cuerpo más expresivo.
¿Por qué solo con caminar sabemos que esa persona es un bailarín/a? porque el trabajo tan extremo de flexibilidad que le exige su profesión, hace que un simple paso o gesto esté cargado de expresión, limpieza y fluidez.
Si como comunicadores comenzamos a trabajar la flexibilidad de cada elemento expresivo, con el tiempo nos daremos cuenta que esa parte, poco a poco, tendrá más expresión por si sola. Con el ejercicio anterior ya te habrás dado cuenta de qué elementos expresivos estás más acostumbrado a usar y cuáles no; algunos los notarás rígidos y otros más fluidos, por eso tenemos que trabajar con conciencia buscando fluidez y control en cada uno de ellos.
EJERCICIO 2: Siempre usando una música lenta y tranquila, movemos cada parte de nuestro cuerpo coordinándola con la respiración: inspiramos profundamente y al exhalar es cuando estiramos con un movimiento amplio la parte del cuerpo en cuestión hasta su límite, buscando cada vez más amplitud en cada movimiento.
3. disociación corporal: domina tu cuerpo para que no sea él que te domine a ti.
La disociación es un aspecto corporal que no se suele trabajar a menudo, pero que a nivel comunicativo tiene mucha importancia. Durante la comunicación, ser consciente de qué parte estamos usando para expresar nuestro mensaje y controlarla, nos ayuda a canalizar la energía del mensaje para que llegue más directo al destinatario. Además la disociación es un elemento fundamental para dominar los distintos medios comunicativos (locución, video, directo) porque cada uno de ellos exige que se potencie una parte específica.
EJERCICIO 3: piensa en un mensaje claro que te gustaría transmitir (confianza a un ser querido, prohibir algo a tu hijo, agradecer a un amigo un gesto, etc.) y luego intenta transmitirlo con cada parte del cuerpo buscando usar solo un elemento expresivo. Al principio puede parecer complicado por la falta de entrenamiento, pero con el tiempo verás cómo aprenderás a controlar cada parte de cuerpo y el mensaje se potenciará.
4. calidades de movimiento:usa matices en tu expresividad según la situación.
Cuando nos movemos usamos diferentes formas de expresión de forma inconsciente; por eso tenemos que aprender a entender qué tipo de matices usamos y aprender a manejarlos para potenciar nuestra comunicación.
Los matices más importantes son: matices de recorrido (movimientos largos y cortos), matices de tiempo (movimientos rápidos y lentos); matices de forma (movimientos restos y ondulados) y matices de género (movimiento sueltos y contenidos).
Ejercitarse usando conscientemente cada matiz es fundamental para poder dominarlo y usarlo en momentos concretos: por ejemplo un profesor de yoga tendrá que ser consciente que para relajar a su público tiene que utilizar movimientos con matices más ondulados, lentos, largos y contenidos; mientras que un profesor de zumba tendrá que usar movimientos más rectos, rápidos, sueltos y largos. Este ejemplo puede aplicarse a cualquier trabajo y muchos de mis alumnos (médicos, abogados, profesores y políticos) se han dado cuenta del poder comunicativo que conlleva dominar estos matices según la situación.
EJERCICIO 4: para trabajar con los matices de movimiento, la forma más efectiva es un ejercicio de expresión coporal sobre los 4 elementos del universo: fuego, aire, tierra y agua. Cada uno de esto tiene unas características que corresponden a los matices arriba mencionados; por ejemplo la tierra se puede representar corporalmente con movimientos lentos, contenidos, cortos y rectos, el aire con movimientos contenidos, largos, ondulados y lentos, el agua con movimientos sueltos, ondulados, rápidos y largos y el fuego con movimientos sueltos, rectos, cortos y rápidos. El ejercicio consiste de representar con tu cuerpo cada elementos. Si te acompañas de una música quizá te pueda ayudar a entrar en esa dinámica. Es importante que cada música represente la energía de ese elemento.
5. Emotividad corporal: aplica emociones a cada gesto y conviértelo en acción.
El último elemento que entra en juego en este entrenamiento corporal para comunicadores es el tema emocional. Además de dominar la parte técnica de la expresividad, luego hay que ser capaces de aplicar emociones a nuestra comunicación, ya que es el elemento que más potencia el mensaje final. ¿por qué un asistente virtual nunca podrá ser cómo una persona real? porque no es capaz de transmitir emociones con su voz ni de entender las nuestras. Esa capacidad solo la tenemos los seres humanos, y en la comunicación trasmitir emociones es algo básico si queremos conectar con nuestro destinatario, da igual si somos abogados, profesores, banqueros, etc.
Siempre las emociones influyen en nuestra comunicación.
EJERCICIO 5: pon distintos tipos de música y según lo que te transmita cada una, usa tu cuerpo para transmitir esas emociones.
Como he hablado en muchas ocasiones, la comunicación es algo mucho más complejo de lo que creemos; debería ser una asignatura obligatoria desde pequeños porque al final nuestro día a día se resume en comunicar, sentir y responder a todos los niveles.
Puede que muchos de los ejercicios que haya mencionado te resulten complicados al principio, pero ¡no desistas! la constancia es la clave para poder mejorar. Todos mis alumnos han probado en su piel lo que te estoy diciendo, de hecho en los testimonio que podeis leer en mi web y en Google, se dan cuenta de la importancia de dominar estos aspectos para ser un excelente comunicador.
Si quieres también mejorar tu comunicación o quieres trabajar algún aspecto en concreto puedes reservar tu primera clase online conmigo, donde trazaré para ti un entrenamiento personalizado según tus necesidades y objetivos.
No pierdas más clientes ni creas que la comunicación no es para ti, ¡atrévete y te sorprenderás!
